¿Sabías que tomar baños con agua fría, puede ayudarte a adelgazar un poco? Ciertamente no tendrás una pérdida de peso significativa, como la que podrías obtener de un buen régimen alimenticio combinado con ejercicio regular, pero si que te servirá de apoyo para deshacerte de esa piel sobrante que muchas veces es tan difícil de tonificar.
Lo que hace tan efectivo a este método, es el hecho de que al ajustar la temperatura que tiene contacto con el cuerpo, se logra activar la grasa del metabolismo, permitiendo su aceleración en la quema de calorías y obteniendo además, otros beneficios como los siguientes:
- Mejora de la circulación sanguínea, evitando problemas como las várices y la trombosis.
- Piel más firme en zonas flácidas.
- Prevención de la celutitis en partes como los glúteos.
Ya ves que es muy recomendable tomar algunos baños utilizando agua fría. Y aunque esto en un principio podría resultarte chocante, porque casi todo mundo esta acostumbrado a bañarse con agua caliente, debes saber que estarias beneficiando mucho tu salud y tu silueta si te prestas a intentarlo.
Realizar una rutina en la que te duches con agua fría es muy sencillo y no te tomará más de 5 minutos. Solo sigue las instrucciones a continuación.
- Cólocate bajo el chorro con agua fría y quédate ahí durante 20 segundos.
- Luego sube la temperatura del agua hasta que este caliente y deja que te moje por espacio de 10 segundos.
- Vuelve a estar otros 20 segundos bajo agua fría y alterna los pasos anteriores hasta completar el tiempo indicado.
Una vez que te acostumbres a llevar a cabo este tipo de baños, algunas veces a la semana, tu cuerpo se encontrará más habituado y dispuesto. Podrás apreciar también que has reducido el volumen de algunas zonas del mismo, ¡incluso podrías perder una o dos tallas!