Está claro que la comida rápida no es una opción saludable para comer; no obstante también entendemos que a veces no hay otra opción cuando sales de casa o bien, cuando sales a comer con tus amigos o familia. Para mantenerte delgado no es necesario que renuncies a comer tus cosas favoritas, ni tampoco que te pongas demasiado estricto. Tan solo échale un vistazo a los consejos que te damos hoy, para que la comida chatarra no arruine por completo tus esfuerzos por bajar de peso.
- Modérate con las cantidades que consumes. Es muy importante que tengas autocontrol cada vez que te encuentres en un establecimiento de comida rápida. Puede ser difícil, pero recuerda que mientras menos de ella consumas menos calorías van a entrar a tu cuerpo. Tan solo es cuestión de que midas tus raciones.
- Elimina el refresco, de ser posible. Algunas restaurantes de hamburguesas ofrecen opciones más ligeras, como aguas saborizadas o tés. Siempre será mejor recurrir a ellas en vez de pedir un refresco cargado de azúcar. En última instancia si no hay otra alternativa, bebe solo un vaso de refresco y olvídate del «refill» que muchas veces se ofrece en estos sitios.
- Opta por los alimentos más «light». Siempre hay maneras de que la comida rápida tenga menos calorías. Pide una hamburguesa de pavo o de pollo sin queso ni demasiados aderezos. Olvídate del queso extra en la pizza y ordénala de vegetales, dejando de lado los embutidos. No llenes de condimentos las papas fritas.
- Si hay ensalada en el menú, aférrate a ella. Puede que te haga sentirte más satisfecho y siempre será más recomendable que otras comidas que están repletas de grasa. Aunque también debes fijarte si las ensaladas en las tiendas de comida rápida tienen demasiado aderezo, ya que este también puede aumentar sus calorías.