Al empezar una dieta, lo que más le suele preocupar a las personas que quieren bajar de peso es el hambre. Y es que esta sensación no es fácil de hacer a un lado y puede llegar a sabotearte como no te imaginas cuando se trata de perder unos kilos extra. La mayoría de la gente coincide sin embargo, en que nada tiene de extraño sentirse hambriento mientras se está adelgazando. ¿Será que esta sensación es realmente normal? Nosotros te respondemos esta pregunta a continuación.
¿Por qué sentimos hambre cuando empezamos una dieta?
Hay que decir que de hecho, sentirse hambriento no es lo que se dice normal. Uno no debería sentir ganas de comer a cualquier hora en tanto lleve una alimentación balanceada, porque el objetivo de la misma, es brindarle al organismo suficiente energía como para no ceder a antojos.
No obstante, esto es algo que le suele pasar a la mayoría de las personas y se debe simplemente a que están educando de nuevo a sus cuerpos. Cuando se ha llevado una mala alimentación, faltante de nutrientes y en la que se tiene como costumbre ingerir una buena cantidad de grasas y azúcares, el organismo tarda tiempo en comprender que debe adaptarse a un nuevo cambio.
Lo que muchos definen como hambre la mayoría de las veces, no es más que ansiedad por consumir de nuevo antojos como los ya mencionados.
¿Qué se puede hacer para evitar la ansiedad por el hambre?
Si estás enfrentándote con esta situación, hay medidas que puedes tomar para evitar subir de peso debido a la misma:
- Siempre ten colaciones saludables a la mano. Las frutas y las semillas como nueces y avellanas, tienen pocas calorías y te satisfacen.
- Distráete. Si sabes que comiste bien y sientes ganas de comer, quizá debas ocupar tu tiempo en otras actividades.