Las mudanzas o traslados de hogar suelen convertirse en periodos muy estresantes que acaban afectando a ciertos aspectos de nuestra vida. Uno de los aspectos que se ven afectados con más fuerza es el de la alimentación, algo muy común en situaciones que representan grandes cambios con respecto a nuestra rutina diaria.
Desde la empresa Mudanzas Cañadas Granada (ir a su web) nos explican que sus clientes les suelen reportar experiencias estresantes que incluyen alteraciones en la alimentación. “Se suele comer peor durante una mudanza, comida rápida principalmente, y debido a los nervios y el estrés, se suele comer menos cantidad, lo cual afecta a la energía y el ánimo de nuestros clientes cuando afrontan el cambio de hogar”, nos comentan desde Mudanzas Cañadas.
Los peligros de una mala alimentación durante una mudanza
Y es que la alimentación es algo muy importante, sobre todo en épocas donde gastamos más energía, tanto física como mental, y por lo tanto nuestro cuerpo necesita de más nutrientes para afrontar las estresantes acciones a las que nos enfrentamos. Por ello debemos dedicar tiempo a nuestra alimentación, y no dejar que el resto de tareas minimicen el tiempo que dedicamos a alimentarnos.
Bien es cierto que si contratamos a una empresa de mudanzas que nos ayude con la mudanza, podremos contar con más tiempo y más tranquilidad para poder comer bien e hidratarnos correctamente.
Una mala alimentación durante un periodo de mudanzas puede desencadenar en fatiga, problemas musculares, enfermedades, desvanecimientos, etc. Así que muy atentos a este aspecto si vamos a afrontar una mudanza próximamente.
Consejos y recomendaciones para no ver alterada nuestra alimentación durante una mudanza
Para evitar estas alteraciones, vamos a enumerar una serie de consejos que pueden
ser muy importantes:
- Evitar la comida rápida: Será una tentación antes, durante, y después de la mudanza.
Pero no debemos caer en la tentación. Hay muchas formas de comer sano en
circunstancias difíciles: comprar comidas elaboradas caseras, comer en restaurantes,
planificar la comida con tiempo, comer en casa de amigos o familiares, etc. - Hidratarse bien: En la alimentación no solo juega el factor comida, hidratarse bien
durante un periodo de mudanza será muy importante para mantener un equilibrio
corporal que nos ayude a funcionar bien durante cada día. Por ello siempre deberemos
ir provistos de algunas botellas de agua a mano para poder hidratarnos correctamente. - No saltarse comidas: Cuando menos tiempo tenemos, una práctica habitual es la de
saltarse comidas. Durante una mudanza no hay que saltarse ninguna comida,
deberemos parar comer siempre. Es la única forma de afrontar el resto del día con
garantías. - Relajarse antes de cada comida: En época de estrés, se suele tener menos hambre por
el estado de alerta general del cuerpo y el sistema nervioso. Por ello es muy probable
que sientas que no tienes hambre, pero lo ideal es no saltarse comidas y seguir una
rutina de alimentación constante para obtener los nutrientes que nuestro cuerpo
necesita para funcionar a la perfección. Por ello, 30 minutos de la hora de la comida,
parar y relajarse es un buen ejercicio para sentir el hambre normal y poder comer de
forma totalmente normal. - La fruta, un gran aliado: Por sus características, la fruta es un gran alimento para
consumir en época de estrés y mudanzas. Es fácil de transportar, fácil de consumir,
aporta gran parte de los nutrientes que necesitamos, y por qué no decirlo, está muy
buena. - Solicitar ayuda con la mudanza: En ocasiones, en la vida, hay que saber delegar y pedir
ayuda. A veces la mejor forma de no estresarnos con una mudanza es no cargar con
toda la responsabilidad y el esfuerzo. Por ello podemos pedir ayuda a amigos,
familiares y si lo necesitamos, a una empresa de mudanzas.
