Está claro que para bajar de peso no hace falta morirse de hambre, sino más bien hacer unos cuantos ajustes en la dieta que se lleva para alimentarnos bien sin tener que sentirnos mal. Y muchas veces en realidad, puedes darte cuenta de que estás consumiendo más calorías de las que necesitas en realidad, pero te has acostumbrado tanto, que salirte de la rutina podría hacer que te sientas hambriento o más bien con antojo de comida. ¿Es posible evitar todo esto? Lo cierto es que sí, si sigues los consejos sencillos que te mostramos en esta ocasión.
- Consume huevos. Está comprobado que desayunar huevos es una forma muy eficaz de sentirte más satisfecho a lo largo del día, pues te brindan mucha energía y también son una fuente importante de proteínas.
- Revisa tus menús a diario. Anotar todo lo que usualmente comes puede ser de ayuda para que te des cuenta de cuales son los alimentos que puedes evitar, tales como postres o harinas refinadas.
- Siempre sírvete en platos pequeños. Esto te da la sensación de que te llenas con porciones que son moderadas. Es uno de los mejores tips para adelgazar que puedes poner en practica desde hoy mismo.
- Incluye siempre una ensalada. Las ensaladas pueden convertirse en tus mejores amigas, porque te quitan el hambre pero también son ligeras, y evitan que consumas de más otros acompañamientos como la carne o las grasas.
- No te presiones por acabar todo lo que está en el plato. Si te sientes satisfecho antes de terminar todos tus alimentos, está bien. Nos enseñan desde pequeños a terminarnos todo lo que nos sirven, pero en realidad está es una costumbre que a la larga puede ser perjudicial.
Estos consejos, bien aplicados, pueden hacerte recortar hasta 500 calorías por día si eres constante y sabes respetarlos. ¡Anímate a intentar!