La anorexia lamentablemente, se ha convertido en un trastorno alimenticio cada vez más común, que no distingue sexo, edad ni condición; aunque afecta mayormente a las chicas jóvenes. Lo peor de esta enfermedad es que, mientras más se deja avanzar, más difícil es rehabilitar a la persona que la padece (aunque no imposible), haciendo que se acerque peligrosamente a consecuencias fatales. Por eso es muy importante el saberla detectar a tiempo y conocer las principales señales de su presencia. Hoy te comentamos aquellas a las que deberías prestar atención.
- Pérdida de peso de manera súbita. El que una persona baje de repente una considerable cantidad de kilos, no es normal. Con frecuencia los anoréxicos sufren cambios repentinos en su peso, debido a la falta de comida o el uso de laxantes o medicamentos inapropiados para ellos.
- Aislamiento. La anorexia provoca que las personas poco a poco, vayan aislándose y encerrándose en si mismas, dejando su vida social de lado. Sobretodo si se trata de eventos como comidas familiares o simplemente, salir con amigos a comer por ahí.
- Obsesionarse con el peso. De pronto todo gira alrededor de cuanto pesan, de las calorías que tiene la comida y de como conseguir llegar al peso ideal, sin importar lo que deban hacer para conseguirlo. Hay sentimientos como la aversión o la culpa hacia los alimentos.
- Hábitos alimenticios extraños. Como esconder la comida, contar las calorías obsesivamente, comer a escondidas o incluso decidir de un día a otro que solo van a consumir ciertos alimentos.
- Aparición de vello. No muchos saben que puede ser una señal de anorexia y se debe a que el metabolismo descontrola sus hormonas a causa del trastorno. Las vellosidades pueden aparecer en zonas como la cara, los brazos o las piernas.
- Usar demasiada ropa suelta. Para esconder la repentina pérdida de peso y porque nunca se está satisfecho con el cuerpo.