En artículos anteriores, te hemos mencionado al gluten como una enzima presente en varios cereales y que puede llegar a dificultar bastante la digestión. Es por eso que muchas dietas e incluso atletas profesionales, han optado por exluirlo completamente de sus alimentos. Esta es una decisión que a muchos podría parecerles drástico pero que no obstante, podrías considerar debido a las ventajas que conlleva. Para que te des cuenta de ello basta con que leas los efectos negativos más conocidos del gluten a continuación:
- Provoca inflamación. Si sientes algo de hinchazón y incluso dolor a veces en la zona del intestino, deberías plantearte seriamente tu consumo de gluten. Estar inflamado puede ser un verdadero obstáculo para cuando intentas ejercitarte y surge como una reacción de tu organismo, debido al contacto de la enzima con tus paredes intestinales.
- Reduce la eficacia del sistema inmunológico. Otro aspecto malo del gluten es el hecho de que puede bloquear las células inmunes que se encuentran presentes en el intestino. Las consecuencias de esto consisten en que te vuelves más vulnerable a enfermedades como los resfriados; que si bien no son graves, si que suponen un estorbo en tus actividades diarias.
- Limita la absorción de nutrientes. Elementos como vitaminas y minerales son esenciales para el buen funcionamiento de tu cuerpo. El gluten sin embargo, puede dificultar que sean debidamente absorbidos y acarrearte algunos problemas como la falta de concentración o rápidez mental, fatiga o cambios dentro de tu metabolismo.
- Aumenta tus posibilidades de bajar de peso. Por si fuera poco, esta enzima también te provoca más hambre y te crea una necesidad constante por consumir alimentos refinados como las pastas, el pan blanco y la bollería. Todos ellos incrementan la capacidad del cuerpo para retener grasa que luego se hace evidente en zonas como el abdomen y las caderas.
